Tanto a novatos como a los más expertos, seguro que alguna vez os habrá pasado y sino con casi toda probabilidad os pasará, que no quedáis contentos con el resultado del pintado de la maqueta.
Puede ser por falta de experiencia, por no enmascarar bien una zona, por impaciencia en aplicar las sucesivas capas y que se produzcan chorretones, que salga con piel de naranja o simplemente porque no os gusta el color y queréis empezar de nuevo.
Para poder decapar la pintura de la maqueta hay básicamente que tener claro que tipo de pintura se ha usado. Las más habituales en el modelismo son acrílicas, esmaltes, lacas y óleos